Gorda llegó a la protectora embarazada. poco después dio a luz a sus pequeños y con muchísimo amor y paciencia los cuidó hasta que estuvieron listos para ser adoptados. 

Como ocurre tantas veces, ella quedó atrás... Sus hijos pequeños y juguetones encontraron hogar rápidamente, pero Gorda, ya adulta y más tranquila, sigue esperando en la protectora, sola.

No pensamos rendirnos hasta encontrarle casa. Es una gata preciosa, coqueta y dulce. ES muy cariñosa, sociable y le encantan las personas. Disfruta de las caricias y los mimos y podría pasarse el día entero a tu lado.

Después de todo lo que le ha pasado creemo que es hora de que encuentre una familia definitiva que se enamore de su encantadora personalidad y le de el maor que tanto merece.😍