Shelvi es un precioso podenco que llegó a la prote con 10 meses y se ha pasado toda su vida encerrado en una jaula con mucho miedo. Es muy triste pasarse la vida encerrado así. De momento, en todos estos años nadie se ha fijado en él, por esta razón buscamos madrina o padrino que venga a visitarlo de vez en cuando, que se gane su confianza poco a poco y que se sienta amado. Sabemos que Shelvi tiene un gran corazón y sería un perro diez, pero el abandono le ha pasado factura. Si le sumamos que los podencos de por sí son bastante miedosos y que en la protectora hay más de 300 pelud@s, entre perr@s y gat@s,eso no le ayuda nada a relajarse e ir ganando confianza. 

¿Alguien que tenga paciencia y quiera apadrinarlo para que, por fin, se sienta querido? Quizás esto le ayudaría a conseguir salir adoptado. 

Nosotr@s no perdemos la esperanza y esperamos que pronto alguien lo quiera mucho.